jueves, 22 de septiembre de 2011

La "depre" del destete

Una semana después de cumplir un año, Gabriel decidió dejar de compartir esos maravillosos momentos de lactancia conmigo. Suena trágico, ahora que leo cómo lo describo, y parece que ese sentimiento "depre" que pensaba que ya había superado por el destete, todavía late en algún rincón de mi ser, aunque ya de manera tímida y silenciosa, como la de unos pasos que se van alejando del camino. Y es increíble ver cómo desde tan chiquititos nuestros hijos van decidiendo a qué velocidad y cómo recorrer ese camino.

Luego del nacimiento de Gabriel no experimenté los famosos "baby blues", como sí me había pasado con Ignacio, tres años antes. Al contrario, extrañamente, me sentía energizada y con muchas ganas de atender a mis, ahora, dos príncipes; me sentía poderosa, como si de repente me hubiera sido concedido un superpoder para mantenerme full adrenalina. Claro, a medida que pasaron los días, la falta de sueño hizo su trabajo y esas ganas hiperinfladas, se fueron apaciguando. Sentía cansancio, pero no tristeza.

La "depre" que no experimenté con Gabriel luego del parto, la viví al momento del destete. Me costó muchísimo. Sentí una pena tremenda. Y es que el vínculo de lactancia en un año se hizo fuerte, cada vez más hermoso. Insistí, por supuesto, pero luego desistí; debía respetar sus gustos, sus tiempos, y aceptar que esa etapa había terminado.

¿Tu bebe ya no "mama"? Me dicen muchas amigas últimamente. Y es que aquí, muchas veces, nos referimos así a la lactancia. Quiero pensar y, he decido hacerlo así, que "dar de mamar" va mucho más allá del hecho de dar de lactar. En mi cabeza es sinónimo de "dar de mamá". Desde el vientre, desde el pecho, desde el abrazo, desde las sonrisas, desde los consejos, es "darme" a ellos cuando lo necesiten. Ese será un vínculo que me esforzaré por construir y aunque acepte algún eventual "destete", espero la relación sea lo suficientemente fuerte para que los ayude a ser felices y a estar en paz consigo mismos y con los demás.


2 comentarios:

  1. Ha! I understand so well how you are feeling! It's so tough when you haven't decided yourself that the time for weaning your child has come! A few weeks ago Valentine started screaming each time I tried to breastfeed, she was hysterical! Was so painful for me that she ruined that special moment and that refused to take that special "gift" I had for her. But as I had started to reduce feeds a few months earlier, progressively, my sadness went away quite rapidly. Animo Oli!

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  2. Hi Angie, thanks for sharing :) I'm more relaxed now, fortunately. It's just hard, I guess, to see your kids grow so fast!

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